miércoles, 15 de septiembre de 2010

Vejez Perdonada.

Los escritos del tiempo. 10 de Ago, a las 20:58

Carlos llegaba de su trabajo como cada día, aparcaba su coche a las 20:00, subíaa casa y lo primero que hacía era besar a su mujer María y luego a sus dos hijos, Alberto y Pablo. Lo tenía todo, un hogar feliz, un proyecto casi cumplido y un sueño casi acabado.

- Cualquier persona aspiraría a lo que yo tengo. Pero me lo merezco por mi lucha........ Antonio se repetía estas palabras cada día.....
Siguieron pasando los años y sus dos hijos se casaron, tuvieron descendencía y le dieron los ansiados nietos.

Todo parecía ir bien y sus sueños parecían estar cumplidos del todo.
El día de su cumpleaños nació su nieta Ana. Carlos acababa de cumplir 67 años, y era el mejor regalo que le habían hecho en su vida.
Carlos se dirigia al paritorio y se sentó con su esposa María en la sala de espera. Estaban preparando al bebé para que pudieran verlo.
María cogío fuertemente la mano de su compañero y lo miro con sus ojos hundidos por la edad.

-Cielo, Carlos que te pasa.......tienes las manos sudorosas y te tiemblan mucho.
El respondió al gesto de María soltando su mano.Se levantó brevemente y volvió a sentarse.
-Hoy es mi cumpleaños y es cierto que tendría que estar feliz. No puedo quejarme de la vida salvo en una cosa María........
-¿ En que Carlos?
- ¿Recuerdas aquel viaje a Santiago en el qué te prometí que siempre te sería sincero? Pues no lo he sido en todo...
-Pero Carlos.....no es momento amor mío....disfrutemos de nuestro nieto...........si no hubieses sido sincero conmigo, no estaríamos hoy aquí.
- Lo sé, pero es que.........

- Carlos, mírame por favor.......nunca nos han hecho falta palabras para decirnos algunas cosas, incluso las más dolorosas y las más bellas sencillamente las hemos cogido por merecerlas. Llevamos juntos 48 años. Si tu mayor pesar es no haberme dicho en ese viaje que dudabas en tu amor por mi, no te preocupes. Yo también lo sentí en este tiempo. Las dudas y los miedos, los hemos superado juntos. Pero por callarlo nos ha sido un cobarde. Me perdonaste en hace 20 años cuando te pedí el divorcio por la muerte de nuestra hija Marta, porque creia que no me quedaba nada por lo que luchar. Y sin embargo fuiste paciente. Firmaste ese papel porque me querías. Volviste a cuidarme cuando enfermé......y recuerdo lo que me dijiste........

Carlos respiró........- te dije; no vengo aquí por pena, no estoy aquí por nuestro amor, ni por nuestros hijos.........lo estoy por nosotros........no espero nada a cambio por lo que voy a hacer......solo que recuperes la sonrisa que un día te hacía ser tu..............

En ese momento, Carlos se sentó y volvió a tomar la mano de su esposa........María, toco en ese momento el corazón de su amado y le....

- Hasta que la muerte nos separe.......no por insposición, ni por amor...eres mi alma gemela..........

En ese instante el bebé salió del paritorio.....tenía un tono rosado precioso y unos ojos maravillosos........


- Carlos miró a María......y sonrió.....

- Si, Carlos en efecto.......el circulo se ha cerrado.....hay una nueva familia completa a pesar de sus dudas. La vida ya es complicada, pero si nos basamos en los miedos la complicamos nosotros por no querer ver la verdad.


No hay comentarios: